Canciones para la paz

Creado

Febrero 24, 2015

La música como camino de entendimiento hacia la paz fue la premisa que reunió en un mismo espacio a la soprano y directora de orquesta, Ainhoa Arteta, y al catedrático de Metafísica de la Universidad Autónoma de Madrid, Ángel Gabilondo, el pasado 23 de febrero en la Facultad de Filosofía y Letras. La conferencia se produjo dos días después de la participación de Arteta en el concierto dedicado al profesor Francisco Tomás y Valiente, en el marco del Ciclo de Grandes Autores e Intérpretes de la Música de la UAM, y forma parte del programa “Dale créditos a tus oídos”, una iniciativa organizada por el Centro Superior de Investigación y Promoción de la Música, que combina la celebración de conciertos en el Auditorio Nacional con la posterior celebración de charlas y mesas redondas con los propios intérpretes, directores y compositores.

LA VOZ, EL ÚNICO INSTRUMENTO VIVO QUE EXISTE

Con el recuerdo aún fresco de su actuación, tocó pasar de la partitura a las palabras a través de un emotivo discurso en homenaje al profesor Francisco Tomás y Valiente. Bajo el título “Canciones para la paz” Arteta hizo alusión a figuras del campo universitario ligadas a la poesía, como Laura Campmany, Blas de Otero o Miguel de Unamuno, citando algunos de sus textos como símbolos de la lucha de la palabra contra la supresión de las ideas.  

“La voz es el único instrumento vivo que existe” concluyó Arteta tras recitar “Cantar de alma” de San Juan de la Cruz, aduciendo a la  igualdad como camino hacia la paz. Uno de los momentos más conmovedores  ocurrió cuando la soprano se dirigió de forma directa al profesor Tomás y Valiente: “Los vascos te estaremos eternamente agradecidos por enseñarnos a valorar lo verdaderamente irrenunciable y que no se puede comprar con dinero: la dignidad”.

La segunda parte de la conferencia abrió un espacio de reflexión entre Ainhoa Arteta y Ángel Gabilondo, con intervenciones del público, sobre aspectos como el terrorismo, la convivencia, el respeto y el perdón. Gabilondo incidió en la relevancia de la cultura y educación como elementos claves para que este tipo de situaciones no vuelvan a repetirse y con la esperanza de construir una sociedad más justa que abogue por la vía de la paz.